Las relaciones históricas entre psiquiatría, derecho y la consideración del enfermo mental como peligroso han marcado profundamente el devenir de la psiquiatría.
Formadora de auténticas estrellas, posee un ojo clínico adiestrado para reconocer a los que tienen potencial para convertirse en buenos cocineros, alentarlos y apoyarlos hasta ver sus proyectos concretados.