Ximena estuvo casada hasta que descubrió que su marido era gay. Su psicoterapeuta holístico le sugirió escribir un diario a manera de terapia. Al terminar, decidió publicarlo para dejar constancia que ella solo quiere dos cosas: lo mejor para los mexicanos y un hombre que cumpla con todas sus expectativas y si no, por lo menos sea straight…