Ficción: características especiales

Un libro asombrado y disconforme de un gran observador de las contradicciones del alma humana. «Una

«Muchos críticos han definido estos cuentos míos como un nuevo tipo de ficción científica. Ahora

Després de laclamat debut de Iolanda Batallé amb La memòria de les formigues, arriba el seu esperat

“Los cuentos viejos del alma” es una propuesta literaria que nos invita a viajar a través de la geografía maravillosa de las enseñanzas y prácticas regulares propias de los cuerpos religiosos del planeta. La obra está repleta de pequeños cuentos que inciden, sobre todo, en la comunicación entre el instructor y el discípulo, y de relatos que recrean la atmósfera propia de la vida de reclusión y de refugio idónea para la vivencia metódica de interiorización y que remarcan el carácter revelador e iluminador de la palabra que señala pero que no reemplaza la meta del peregrino espiritual. Es una celebración del valor de la enseñanza luminosa y del aprendizaje consagrado, en las distintas vías que la Humanidad se ha dado en el curso de los siglos para favorecer el encuentro con nuestro arquetipo celeste, con el alma de todas las cosas. Es también una aproximación a la experiencia cumbre llamada reconciliación en espíritu o o regeneración interna, para la cual tantas tradiciones planetarias han edificado sus sistemas reglares y sus disciplinas devotas y soteriológicas. En fin, los cuentos viejos del alma, con su primoroso encanto y exótico refinamiento, muestran a los ojos inquisidores del lector occidental las modulaciones del alma del Oriente lejano y el perfume balsámico de los silencios y salmodias encendidas de los solitarios del desierto, en una amalgama de textos que procura demostrar en clave literaria la unidad esencial de todas las experiencias religiosas y espirituales de la Humanidad.

«Mi paisano Antonio Pereira es en mi opinión unode los mejores autores de cuentos cortos que ha dado nuestra literatura.»

Julio Llamazares