La historiadora Ema Cibotti agregó a sus conocimientos la búsqueda en cartas y memorias, en documentos oficiales y particulares, y con eso urdió estas pequeñas historias que revelan una espesa trama de hechos menudos, muchas veces obviados o directamente a punto de perderse en el olvido, que sin embargo son constitutivos de nuestro pasado, como lo son de ese edificio los ladrillos y el cemento.