Esta es la historia del chusquero que llegó a duque y del príncipe que llegó a rey. Los dos tuvieron una infancia y una juventud movidas e inciertas. De orígenes muy distintos, tanto don Juan Carlos como Adolfo Suárez vivieron en tensión interior y tuvieron que valerse por sí mismos. Alejados de sus padres, uno hijo de rey y otro republicano, se agarraron a lo que pudieron, adaptándose sin rechist...