Pese al esfuerzo de movimientos y plataformas, el Acuerdo Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP) ha conseguido sortear cualquier debate público serio. Negociado de manera clandestina bajo la presión de las transnacionales radicadas en Estados Unidos y en la Unión Europea, supone, con todo, una nueva vuelta de tuerca en la estrategia de dominación desplegada por estas últimas. En las págin...