Cuando me fui a vivir fuera, empecé a cocinar recetas saludables, básicamente porque no quería alimentarme de ultraprocesados.
Poco a poco me di cuenta de lo mucho que me gustaba el mundo de la cocina y la nutrición, y cada vez investigaba más sobre nuevos ingredientes que podía utilizar en mis recetas, sobre nuevas técnicas y sobre cómo los alimentos son asimilados por nuestro cuerpo. Y así creé...