El regreso de Andrés Neuman a la gran novela tras El viajero del siglo, Premio Alfaguara y Premio de la Crítica.
Una historia sobre la belleza que emerge de las cosas rotas.
«Me mostró sus cicatrices. Un fino entramado en los antebrazos y la espalda. Parecía transportar un árbol. Luego él vio las mías. Nos sentimos livianos, un poco feos y muy bellos. Dos supervivientes. »
El señor Watanabe, super...
El regreso de Andrés Neuman a la gran novela tras El viajero del siglo, Premio Alfaguara y Premio de la Crítica.
Una historia sobre la belleza que emerge de las cosas rotas.
«Me mostró sus cicatrices. Un fino entramado en los antebrazos y la espalda. Parecía transportar un árbol. Luego él vio las mías. Nos sentimos livianos, un poco feos y muy bellos. Dos supervivientes. »
El señor Watanabe, super...