«Uno de esos escritores que, en sus novelas, encarna la conciencia y la memoria mexicana, que demuestra siempre […] que la ficción está por encima de la realidad, aunque toma elementos de ésta y les da otra dimensión a través de la palabra.»
Don Artemio nos comenta que en fragante locutorio de San Jerónimo, la melodiosa Sor Juana Inés de la Cruz tenía todas las tardes, antes de vísperas, animadas reuniones con las personas de más pro en la ciudad, que con su joyante séquito de cortesanos, iban a embelesarse con las palabras de esa monja.
"Masones y Libertadores es más que una novela. Narrada como un relato de aventuras, es también un libro muy entretenido, que atrapa y deja pensando al lector", Francisco Ortega, autor de Logia.