Blitz podría ser una tragicomedia romántica. Pero como ese género no existe, estamos invitados a ignorar las etiquetas y centrarnos de manera apasionada en la peripecia de los personajes. En especial de Beto, un joven arquitecto paisajista que llega a las costas de Múnich en medio de un naufragio vital y sentimental. Invitado a participar en un concurso que podría solucionar sus perspectivas de futuro, ha llegado acompañado por su novia. Pero, casi al instante, su estancia en Alemania se convertirá en una comedia humana. Bajo el destello de un relámpago, que es exactamente lo que significa la palabra blitz, tendrá que afrontar un cambio de vida y de ideales. Llena de emotivas instantáneas del amor perdido, bajo una escritura afilada por el sentido del humor, los personajes parecen deslizarse dentro de un reloj de arena. Porque será la reflexión sobre el discurrir del tiempo lo que conduzca al protagonista hacia una mujer de otra edad, Helga, en un encuentro intergeneracional que es el corazón del relato. Pegado a los pensamientos de Beto, el lector no dejará de preguntarse a cada momento por lo que le espera en la página siguiente. ¿Y ahora qué? La respuesta se esconde en esta narración destilada, la esperada nueva novela de David Trueba tras Saber perder, que se alzó con el Premio de la Crítica en 2008.
Sigurd Mutt regresa a Barcelona. Han pasado casi treinta años. Entonces era un joven criptozoólogo, empeñado junto con sus compañeros Belaire y Sjögren en desentrañar los misterios del Naturalismo Oculto y en rastrear, contra los dictados de la ciencia oficial, la pista de animales peligrosos y animales que no existen. «Ciencia oficial», así la llamaban ellos con desdén, como ya hicieran antes sus maestros.
Pero ahora, a finales de 2007, vencido y cansado, Sigurd Mutt se dirige a Vor, un pueblo en los Pirineos donde tiene intención de pasar una breve temporada en un antiguo balneario de resonancias aristocráticas: el sanatorio Vulturó. Lleva consigo las últimas voluntades de su colega Belaire, que le fueron enviadas a Hamburgo junto con lo que parece ser un fragmento de un insólito texto titulado Tras Columbkill. Si quiere descubrir su alcance y significado, deberá completarlo, algo que sólo podrá hacer en Vulturó.
Allí encontrará a Vicente Baeza, el Rubio, un policía retirado que conoce hasta el último secreto del mundo de los timadores; al niño Iván Agulín, quien dice no tener padres; a Olimpia Sanderson, una mujer alojada en el piso más alto que no sale jamás de su habitación; a Tod Volta, un distinguido caballero fascinado por la estrategia militar de todos los tiempos; y a la señorita Elvira, un ser esquivo y sugerente con «aspecto de catequista».
Unas veces con ellos y otras contra ellos, siguiendo el enigmático capricho de Belaire y su texto Tras Columbkill, Sigurd Mutt se verá inmerso en dos universos que le son ajenos: por una parte, la vida recatada del escritor José Echegaray, primer Nobel de la literatura española, y por otra, la vida improbable de un santo medieval llamado Columbkill, hacedor de milagros y guerrero infatigable.
Robert Juan-Cantavella crea un mundo cerrado lleno de puertas traseras y teñido de antiguos saberes iconoclastas: la línea imaginaria que une el pueblo de Vor y el sanatorio Vulturó. Un mapa cuyos contornos han sido retrazados durante los últimos años con la sangre de un asesinato que acaba manchando las manos de Mutt.
En un gesto que tiene algo de bandazo a contracorriente, Juan-Cantavella, autor entre otros títulos de Proust Fiction, tan celebrado, presenta un excitante relato de misterio que es también la historia de unas ideas inciertas y un gabinete de curiosidades.
La última novela del Premio Nobel de Literatura 2021, inédita en
Uma história de amor, perda, legado e reencontro que ninguém vai
Una apasionante historia que cambió la teoría de los números en plena devastación a causa de la Primera Guerra Mundial.