En 1951, en pleno franquismo, se inauguraba La Ciudad de los Muchachos, un hogar de aprendizaje en el bosque de Collserola para niños huérfanos y sin recursos. Pero lo que se vendía como una institución ejemplar, réplica de un proyecto innovador, se convirtió en un infierno para muchos de los que vivieron allí. Emilio y Carlos entre ellos. Allí perdieron mucho más que la inocencia, y todavía hoy sufren sus consecuencias en secreto. Al menos, hasta que estas comienzan a afectar directamente sobre aquellos que más aman.
¿En qué tipo de persona se convierte un niño que, cuando más necesita atención y cariño, sólo recibe gritos, castigos y desprecios?
Esta es una historia de resiliencia; sobre las luces y sombras propias y ajenas. Una crítica al sistema educativo del franquismo, basado en el adoctrinamiento y la imposición incuestionable de la autoridad. Una novela que demuestra que la compasión es la forma de amor más importante que existe.
Milán en pleno agosto. La ciudad está casi desierta, todas las tiendas están cerradas y el calor es insoportable. El narrador, Jean B., director de documentales, se refugia en su hotel y escucha al barman contándole a otro cliente que hace unos días se suicidó allí una mujer francesa. Más tarde le pregunta al barman por esa mujer y éste le cuenta algunas cosas: que venía de París, que iba a reunirse con unos amigos en Capri, que era muy guapa... Ya en la estación, antes de partir, el narrador compra el Corriere della Sera y lee un suelto sobre ese suicidio. La información allí contenida, pese a las imprecisiones, le permite deducir que él conocía a la fallecida: Ingrid Teyrsen. Empeñado en huir de su propia vida en París, Jean B. decide seguir el rastro de ese fantasma, reconstruir su historia. Y su búsqueda le llevará al París de la Ocupación, donde ella, joven bailarina que vivía con su padre –un médico judío austriaco refugiado–, trataba de pasar desapercibida. Y también a la Costa Azul, adonde Ingrid huyó con Paul Rigaud, otro personaje en fuga, obligado a deshacerse de su pasado, del que apenas podrá conservar algún recuerdo. Allí la pareja se refugia en un hotel que todavía guarda vestigios del esplendor de antes de la guerra y él se siente espiado mientras pasea por la playa... Una vez más, rebuscando en las brumas de la memoria, reconstruyendo mediante retazos las vidas de unos personajes escurridizos, Patrick Modiano nos sumerge en una indagación detectivesca que resuelve algunos misterios y plantea muchas preguntas. Y, gracias a la capacidad evocadora de este escritor deslumbrante galardonado con el Premio Nobel, el pasado evanescente cobra vida y desvela sus enigmas.