“Todo lo que hacía lo hacía en una frecuencia distinta. Ella era una canción final. Una melodía de cierre, donde todo tiende hacia arriba, despidiendo los últimos registros de una vida que se apaga. A mí solo me bastaba con escucharla”
«“María, esta es la paradoja de la vida: muchas veces la verdad está oculta detrás del absurdo” […] Tal vez por eso hay que sufrir para conocer la felicidad».