El norte de África es el balcón del mundo árabe y musulmán sobre Europa. Entre el Atlántico y el mar Rojo viven 200 millones de personas –un tercio menores de quince años– que comparten situaciones semejantes: despotismo y corrupción, estrechez económica y desequilibrios sociales; pero también el orgullo de pertenecer a una vieja civilización, una inquebrantable pasión por la vida y mucha sed de l...