Durante la primavera de 2015, las negociaciones para renovar los programas de rescate entre el recién elegido gobierno griego de Syriza (el partido de izquierda radical) y la troika pasaban por un momento tan difícil y confuso que, en un momento de exasperación, Christine Lagarde, la directora del Fondo Monetario Internacional, reclamó a ambos que se comportaran como adultos.
Parte de la confusió...