Yo no tengo la culpa: "Sí, desde que empezó a trabajar allí como botones, habían ocurrido muchas cosas. Llegó primero a reportero deportivo, y luego a jefe de sección. Más tarde a subdirector. Y así continuaba. Míster Blattle había puesto en él toda su confianza... Mejor para míster Blattle. Creía merecer aquella confianza. Míster Blattle era el dueño absoluto del periódico. Y era buena persona. Y...