El once de septiembre de 2001 el periodista Mario Palmero fue enviado de la ciudad de México a Nueva York a fin de cubrir el atentado contra las Torres Gemelas. Dado que los vuelos estaban interrumpidos, viajó en coche hasta Manhattan sin soltar el volante durante tres días, convencido de que pronto estallaría la Tercera Guerra Mundial. Lo acompañaron dos fotógrafos de guerra: un malicioso corresp...