Logan no tenía una buena relación con su tía Elsie y se alejó de ella. Sin embargo, tras su fallecimiento, se convierte en uno de sus herederos junto con Ruby, una amiga de su tía a la que siempre trató como su propia hija.
Una de las reglas del testamento es que ambos se hagan cargo de la granja Kilduncan House, situada en un idílico pueblo de Escocia. Al principio, Logan declina la oferta, pues ...