El último tramo del Transiberiano atraviesa el 'Salvaje Oeste' ruso durante 3648k m. Esta región siempre se ha regido por sus propias reglas. "Moscú queda lejos", reza el mantra local. Sus gentes, al igual que el paisaje, son más toscos y campestres que sus compatriotas occidentales. Durante un viaje por la región antes de que se construyera el Transiberiano, Antón Chéjov escribió que "rebosa vida...