"Hace muchos años —1976— estuve en Tucson, Arizona, y en el planetario de la ciudad había un ciclo de charlas de divulgación. Una de ellas me llamó poderosamente la atención. La ofrecía el astrónomo de la Universidad de Arizona, Nick Woolf, y se titulaba «The Universe: I can Feel it in my Bones». El título era tan provocativo que me inspiró para una charla pública que, ya de vuelta en Chile, he di...