La resolución de problemas es, o debería ser, un aspecto central de la educación matemática. Informes internacionales como PISA han subrayado la importancia de este enfoque, cuyo objetivo no es tanto cuantificar el saber de los estudiantes como evaluar su aplicación a situaciones de la vida real. Sus beneficios resultan innegables para el alumnado: además de la adquisición de conocimientos y estra...