Laura no necesitaba más emociones, ya había tenido suficientes en sus veintiséis años de vida. Había amado y también había perdido y sufrido. Sólo ansiaba tranquilidad, una vida ordenada, sin sobresaltos…
Pero sus planes se vinieron abajo al conocer a Sergio; sobre todo cuando él le hizo la propuesta más increíble que le habían hecho nunca: una relación únicamente basada en el sexo, sin complicac...