En ningún sitio la soledad es más grata que en la costa oeste. Algunas maravillas atraen a muchedumbres (como los glaciares Franz Josef y Fox y las magníficas Pancake Rocks), pero para explorar las entrañas de la región se necesitan lanchas, helicópteros y rutas de tramping (senderismo). Comprimida entre los Alpes del Sur y el violento mar de Tasmania, la costa oeste abarca casi el 9% de la superf...