No volví a ser lo que era:
"—¿Cuidar niños tú? Sonia, ¿estás segura? Tú eres maestra y con unos cursillos de nada te habrían dado escuela. Tú eres inteligente y los sacarás cuando te lo propongas. De modo que encuentro una monstruosidad y una estupidez del destino que vayas precisamente a cuidar una niña huérfana.
—Tal vez así pueda resarcirme de esta pesadilla —dijo Sonia sin inmutarse demas...