En noviembre de 2015, Luis Bedoya era el dirigente más poderoso del fútbol colombiano. La meteórica carrera que en una década lo llevó a la cúspide del balompié nacional, estuvo a punto de llevarlo a un puesto destacado en la FIFA. Pero todo se derrumbó de un momento a otro. Bedoya desapareció sin dejar rastro y muy a cuentagotas se ha sabido que viajó a Estados Unidos a negociar una rebaja de pen...