Con veinte años, una todavía cree en el amor para toda la vida. Y eso es lo que le pasó a Nora: se enamoró de Giorgio y se casó con él convencida de haber encontrado a su amor verdadero.
Veinte años después, ese supuesto amor —al que Nora ha cuidado y ayudado a ascender en su carrera— la deja por una mujer más joven. De pronto Nora se siente vieja, gorda, desfasada y, encima, está sin trabajo.
Gra...