El muchacho listucu que en los años cincuenta pastoreaba ovejas en las laderas de Peña Labra se convertiría en 2003 en presidente de Cantabria. Esta es su historia. Y nos la cuenta con ese estilo único que lo ha hecho popular y querido, con sentido del humor y naturalidad.
Miguel Ángel Revilla nos dibuja una España de penuria y esfuerzo que ya no existe. Y relata con viveza cómo, con tesón, anima...