En la actualidad, quienes atravesamos la paternidad padecemos el ideal de ser "buenos padres" de manera aplastante. Queremos que nuestros hijos sean felices todo el tiempo, que no sufran, que no se angustien, que no vivan ningún conflicto. Pero es gracias a esa posibilidad, a esos momentos de crisis, que los vínculos –y las personas– crecen.
En Más crianza, menos terapia, el psicoanalista Luciano...