En un momento como el actual, en el que se pide, se exige incluso, una renovación de la política, que es principalmente una renovación moral, es interesante, y quizás incluso urgente, volver a los textos del principal culpable de que ética y política se piensen por separado. Se ha dicho, y con mucha razón, que El Príncipe fue escrito por los dedos del diablo, y cabe suponer que Maquiavelo ...