Los manuales de historia de la lingüística que se usan en la actualidad no recogen ningún nombre de mujer. Ninguno. Algo que resulta paradójico si tenemos en cuenta que el surgimiento de esta disciplina, en el primer tercio del siglo XX, coincide con el acceso de las mujeres occidentales a la educación superior, eligiendo en muchos casos estudios humanísticos. ¿Cómo explicar este hecho? ¿Acaso nin...