Daniel hace tiempo que se extravió en su adicción a los medicamentos y en el desánimo. Claude aún cree que trabajando duro se puede llegar a algo. Los dos viven en Bruselas y se dedican a vaciar casas de personas fallecidas, la mayoría sin familiares o de hogares tan pobres que nadie quiere hacerse cargo de la mudanza. Kasongo fue alguien en su país, pero aquí está cojo, es pobre y ha perdido su a...