Todo comenzó en 1692, durante un invierno excepcionalmente crudo en Massachusetts, con los gritos y las convulsiones de la hija de un ministro. El pánico estalló por todo el pueblo e involucró a los hombres y a los políticos más prominentes de la colonia. Padres e hijos acusaron a esposas y hermanas, y a todo ser viviente que pudiera resultar una amenaza. Ese año la Colonia de la Bahía ejecutó por...