Una recopilación de relatos en la que se reúnen lo irreverente, lo dulce y lo descorazonado.
Henry David Thoreau afirmó alguna vez que en su cabaña del bosque de Walden tenía tres sillas: «una para la soledad, dos para la amistad, tres para la sociedad. Cuando inesperadamente venía un gran número de visitantes, solo estaba la tercera silla para todos ellos, pero por lo general economizaban espacio...
Una recopilación de relatos en la que se reúnen lo irreverente, lo dulce y lo descorazonado.
Henry David Thoreau afirmó alguna vez que en su cabaña del bosque de Walden tenía tres sillas: «una para la soledad, dos para la amistad, tres para la sociedad. Cuando inesperadamente venía un gran número de visitantes, solo estaba la tercera silla para todos ellos, pero por lo general economizaban espacio...