Los epicúreos, los escépticos y los estoicos no practicaban la filosofía como una disciplina intelectual independiente, sino como un arte universal que se dedica a cuestiones humanas cotidianas y urgentes. En esta clásica obra, Martha Nussbaum defiende que estas escuelas helenísticas se han abandonado injustamente en el recuento filosófico de la «tradición» clásica.
A través del análisis de las ob...