Este libro se hunde en los límites del pensamiento y de la pregunta sin respuesta: ¿Quién crea lo creado? Recorre, por lo tanto, caminos que se pierden ante la inexistencia de la respuesta.
En el comienzo de la Creación está la letra, primera palabra, una Voz que crea en el decir. También la errancia. Del otro lado, la voz humana, que nomina y domina lo creado. La errancia es una experiencia narr...