Con La Mano de la Buena Fortuna, Goran Petrovic logró lo que pocas veces se consigue: esculpir una de las piezas más perfectas que habitan la llamada Literatura Absoluta. Es un relato de las distintas historias de amor que giran alrededor de un libro muy peculiar, Mi legado, de Anastas Branica. A primera vista éste es un libro donde no hay trama ni personajes, sino tan sólo descripciones. Sin emba...