El surgimiento del libro electrónico auguraba la desaparición del libro impreso. Nada más alejado de la realidad actual. En la era del boom de los medios digitales, el libro impreso es parte de «un paisaje más diverso y complejo, con nuevos actores —desde las empresas de tecnología hasta los booktubers— y nuevas tareas —el marketing digital, entre las más relevantes—», como afirman Fernando Esteve...