Vénganse todos ustedes con nosotros. Orejilla es otro mundo -aunque esté en este- y desde allí descubriremos que, aunque parezca increíble, es posible reírse de la crisis. Y a pesar de ella
—¡Doña Rogelia, doña Rogelia, que salimos otra vez en los papeles!
—¿Mandeee? No será en los del Bárcenas…
—Que no, doña Rogelia. ¡Que tenemos otro libro!
—¡Mecagüenlaleche! Levánteme usté un poco el pañuelo...