Maruja acude a una iglesia porque necesita confesarse con el párroco del pueblo, el padre Jorge. Está desesperada y se siente sola. Su pareja, el doctor Milbergen, ha muerto y teme que su cuñado se quede con la casa. La confesión de Maruja se remonta a los años en que su nombre era José María, los inicios de su relación con el doctor, la operación de cambio de sexo y los veinte años de convivencia...