Para dos millones de nacionalistas en Cataluña que creen ser catalanes encerrados en el cuerpo de un español, España es el problema y la independencia, la solución. El nacionalismo les ha proporcionado un mito fundacional, un agravio histórico, un enemigo exterior y un ancla identitaria: la lengua catalana.
España es para esos catalanes independentistas un parásito que se gesta en el vientre de s...