Jaime Garzón fue asesinado hace casi veinte años, pero sigue vivo en la memoria de los colombianos. Su leyenda crece y sus mensajes se mantienen vigentes por la manera tan democrática como criticó y se burló con humor de todos los poderes establecidos. Fue un iconoclasta, un irreverente, que no dejó títere con cabeza. Las nuevas generaciones ven en YouTube los videos de las charlas que dio o segme...