Cabe pensar que la ética no satisface fin alguno en este mundo y que ser moral no entraña ventaja. No obstante, sí hay un sentido para la razón práctica. Una ética de la razón ofrece los principios universales mínimos que garantizan la convivencia entre individuos, y el rendimiento último de la razón práctica en nuestros actos se erige en salvaguarda de los límites esenciales del hombre, es decir,...