Edimburgo es una ciudad que pide ser explorada. Desde las bóvedas y los wynds (callejones) que plagan su Old Town (casco antiguo) hasta las aldeas urbanas de Stockbridge y Cramond, está repleta de rincones curiosos que tientan al caminante para que ande siempre un poco más. Y cada esquina revela estampas repentinas y vistas inesperadas; colinas verdes bañadas por el sol, peñascos rojizos o un dest...