El hombre, así sin más le llama London a su personaje, es nuevo en la comarca y se dirige al campamento donde lo aguardan sus compañeros. No puede decirse que sea un novato, se ha enfrentado antes a climas extremos, donde el frío es una mordedura helada y dolorosa, de hecho, es rápido y práctico en la vida, pero carece de imaginación. Debajo de los 45 grados bajo cero —y está a menos de 60— un hom...