Probablemente importado por los vikingos de las islas de las cuales lleva el nombre, el shetland es un perro dinámico, dulce, obediente, ágil y activo. Su dinamismo y sociabilidad lo llevan a intervenir en las situaciones más variadas de la vida cotidiana. No olvidemos tampoco que este compañero fue en otro tiempo perro de rebaño y guardián de la granja, lo que le confiere un talento innegable com...