Historias sagradas, antiguas y actuales, para amantes del fútbol y no tanto, con su punto de magia o de sinfonía trágica, algunas poéticas, otras divertidas. Todas, una detrás de otra, las cincuenta, con su ritmo, con la música de Petón.
Los que prefieren el ballet al fútbol es que no han visto correr a Zidane. El fútbol bien jugado tiene una belleza y una armonía muy difícil de igualar porque va ...
Historias sagradas, antiguas y actuales, para amantes del fútbol y no tanto, con su punto de magia o de sinfonía trágica, algunas poéticas, otras divertidas. Todas, una detrás de otra, las cincuenta, con su ritmo, con la música de Petón.
Los que prefieren el ballet al fútbol es que no han visto correr a Zidane. El fútbol bien jugado tiene una belleza y una armonía muy difícil de igualar porque va ...