Victor Capesius custodiaba la reserva nazi de gas Zyklon B y proporcionaba fármacos que eran empleados por médicos para llevar a cabo experimentos espantosos y mortales en mujeres embarazadas y niños.
Hurgaba en los cadáveres de los judíos en busca de empastes de oro, y llevado por la codicia, arrastraba pesadas maletas llenas de ese metal extraído a miles de víctimas. El farmacéutico de Auschwit...