Tras vivir durante décadas en Silicon Valley, cerca de la universidad donde da clases de literatura, Hans Ulrich Gumbrecht, uno de los intelectuales europeos más respetados, se dio cuenta de que residía en el centro del mundo. En aquella sucesión de edificios anodinos, destartalados, parecidos a naves industriales, se encontraban las sedes de Facebook, Apple o Google, las empresas que condicionan ...