
El dedo de Dios. La mano de hombre
Disponible
A mí, como a ustedes, supongo, no se me ha aparecido Dios Padre, ni su hijo Jesucristo. No hemos disfrutado de la gracia de ver su rostro que el Antiguo Testamento reconoce a Moisés, Abraham, Jacob, Isaías y Ezequiel; ni tampoco vivimos, en su día, en las tierras de Israel. No sabemos pues cómo eran sus rasgos físicos. Y si el desconocimiento nos ahoga cuando mencionamos las facciones, qué vamos a...
Leer más
Muestra
E-book
epub
16,99 €
A mí, como a ustedes, supongo, no se me ha aparecido Dios Padre, ni su hijo Jesucristo. No hemos disfrutado de la gracia de ver su rostro que el Antiguo Testamento reconoce a Moisés, Abraham, Jacob, Isaías y Ezequiel; ni tampoco vivimos, en su día, en las tierras de Israel. No sabemos pues cómo eran sus rasgos físicos. Y si el desconocimiento nos ahoga cuando mencionamos las facciones, qué vamos a...
Leer más
Seguir al autor/a