Contemplar los cielos estrellados del verano invita a soñar despierto y a maravillarse, pero observarlos con precisión en todas las estaciones es una forma de tomar conciencia -en el verdadero sentido de la palabra- de los mundos que nos rodean: cúmulos estelares, nebulosas, galaxias, planetas... y de disfrutar del placer de descubrirlos y ponerles nombre. Observar el cielo es una actividad sencil...