Alan Bennett, con su mirada entre cándida y malévola, construye con estos dos relatos, tan indecentes como inteligentes, un conmovedor y muy divertido grotesco de la clase media.
La señora Donaldson es una viuda reciente, de cincuenta y cinco años, con una hija casada, puritana e insoportablemente convencional que pretende que su madre viva reverenciando la memoria de un difunto marido muy aburrid...
Alan Bennett, con su mirada entre cándida y malévola, construye con estos dos relatos, tan indecentes como inteligentes, un conmovedor y muy divertido grotesco de la clase media.
La señora Donaldson es una viuda reciente, de cincuenta y cinco años, con una hija casada, puritana e insoportablemente convencional que pretende que su madre viva reverenciando la memoria de un difunto marido muy aburrid...